La Clase G.
Más fuerte que el tiempo.
Hace mucho tiempo, los ingenieros de Graz desarrollaron un tipo completamente nuevo de ADN. El código genético de un todoterreno emblemático, robusto y prácticamente indestructible. Para ello diseñaron piezas que siguen asumiendo su función en nuestros días, sin necesidad de cambio alguno. Componentes que, a lo largo de varias generaciones, han desarrollado un carácter propio. Sin embargo, se equivoca quien piense que la Clase G solo se encuentra en su elemento fuera del asfalto. Basta con dejar atrás unos pocos kilómetros de autopista para constatar que también es imparable en las vías compactadas. El dinamismo y el confort alcanzan un nivel inédito para un todoterreno y transmiten el placer de conducción al que están acostumbrados los conductores de la Clase G en sus incursiones por terrenos agrestes.
Precio (impuestos y tte. incluidos). Desde